Algunos recambios para el coche pueden salirse de nuestro presupuesto y desequilibrar nuestro planning de gasto mensual, pero no por ello está todo perdido, siempre podemos optar por comprar piezas de segunda mano para ahorrar y poder seguir usando el vehículo en cuestión sin haber hecho un desembolso importante de dinero.
Ante esta decisión puede surgirnos una duda y para entenderlo mejor hablaremos sobre un determinado caso. Poniendo como ejemplo la compra de una pieza en un desguace y la llevamos al taller para que la instalen en nuestro coche. ¿pueden negarse a instalar la pieza aportada por nosotros? La respuesta es sencilla aunque hay que destacar varios puntos. El taller puede negarse a instalar estas piezas aportadas por nosotros, aunque no todos los talleres lo hacen hoy en día.
En caso de que el taller las acepte, las examinarán concienzudamente para ver si tienen alguna clase de problema antes de ser instaladas. Por este examen pueden cobrar cierta cantidad de dinero pero no tendría que ser demasiado, pero el precio debería ser incluido en el presupuesto previo a la reparación.
Tanto si la pieza tiene algunos defectos como si está en perfecto estado, el taller no puede garantizar el recambio, pero lo que sí está obligado es a garantizar su instalación durante tres meses o los 2.000 primeros kilómetros que se hayan recorrido tras la entrega del vehículo reparado.
Además todas las piezas de desguaces vendidas deben tener garantía de al menos un año, tal como lo señala la Ley para los productos de segunda mano comprados a comerciantes o establecimientos, con lo que tendremos la seguridad de que en el caso de que la pieza pueda tener un pequeño fallo o no funcione correctamente, tendremos la compensación de otra pieza tal como establece la Ley sin coste alguno.