Al igual que ocurre con los coches clásicos, son muchas personas las que buscan piezas de motocicletas para restaurar sus vehículos, algo que está cada vez más extendido en todo el mundo porque parece ser que a todos los moteros les gustan las motos clásicas para rememorar viejos tiempos, especialmente entre riders de cierta edad.
No solamente a los más nostálgicos, a los coleccionistas, mecánicos o incluso a aquellas personas que ven en la restauración mucho más que nostalgia sino que ven un buen puñado de euros, porque no hay que olvidarse que las motos clásicas restauradas bien pueden llegar a costar una gran cantidad de dinero.
Si las motocicletas tienen 20, 30 o incluso 40 años, no nos será difícil encontrar piezas como un carburador, o en peor de los casos se podría encargar hacerlo dado que posiblemente los planos se puedan encontrar sin demasiados problemas.
La cosa cambia cuando las motocicletas ya tienen muchas más décadas sobre sus espaldas, dado que los planos pueden haberse extraviado (algo que suele ocurrir con mucha frecuencia), puede darse el caso de que queden pocas unidades en buen estado de donde sacar piezas de recambio o en el peor de los casos que no encontremos la forma de conseguir determinada pieza en cuestión.
Nadie dijo que la restauración de motocicletas fuese una tarea sencilla. Si fuese así realmente habría muchas más motocicletas clásicas en las carreteras. Además, una de las grandes ventajas que tienen las personas que se dedican a restaurar motocicletas, sea para su uso personal, para exponer o para vender, es que en Internet, si se pulsan los resortes adecuados, se puede conseguir esa pieza que se lleva tanto tiempo buscando por mucho menos dinero del que se puede imaginar y lo mejor es que con garantía, por lo que no se puede pedir más.