Contratar un seguro para nuestro vehículo es obligatorio, aunque si no queremos acabar vendiéndolo en los desguaces online, hay coberturas que son muy recomendables tener. Hoy en día hay seguros muy baratos, pero son muy básicos, por ello queremos darte unas cuantas pautas sobre las pólizas que debería tener tu vehículo asegurado.
Coberturas necesarias para el seguro de nuestro vehículo
Aunque la responsabilidad civil va implícita en todos los seguros, hay que asegurarse de cuál es el límite que tiene el seguro porque en muchas ocasiones, cuando hay un accidente, esa cantidad es insuficiente. Nunca está de más contratar una cantidad complementaria para asegurarnos de que el seguro cubra mucho más. Esto incrementará las cuotas, pero tendremos más cobertura.
Algo que también puede incrementar las cuotas, aunque no mucho, es la cobertura de lunas. Nos cubre tanto las lunas delantera y trasera, ventanillas e incluso el techo solar. Por unos pocos euros más al mes, podremos ahorrarnos mucho dinero en materiales y mano de obra en caso de que tengamos un accidente o nuestro vehículo sufra un acto vandálico.
Muchas aseguradoras tienen una póliza de asistencia en viaje, aunque es bastante limitada, tanto en kilometraje o incluso en acompañantes del vehículo. Por ello, es recomendable extender esa cobertura también para los ocupantes del vehículo y permitir que estén cubiertos en todo momento, tanto si se sufre un accidente y se necesita hospitalización, alojamiento en un hotel o transporte de regreso al hogar entre otros.
La cobertura contra robo también es algo que debemos tener presente a la hora de contratar un seguro para nuestro vehículo. Aumentar la cuota mensual hará que también aumente la cobertura, dado que a veces no cubre la totalidad del valor del coche, sobre todo si es nuevo.
Lo mismo sucede en caso de incendio, siendo muy aconsejable extender una póliza para que cubra lo máximo en caso de que haya un incendio y se pueda declarar un siniestro total.