Bomba de freno
La bomba de freno es una de las principales piezas del sistema de freno hidráulico. Su misión principal es la de generar la presión suficiente para poder actuar sobre los pistones y bombines de freno.
Esta pieza está compuesta por un cilindro que tiene orificios de entrada y salida de líquido, en su interior hay un pistón con un retén que hace que el interior del cilindro permanezca estanco y que se empuja por un vástago de unión al pedal de freno.
Descripción
Tips de mantenimiento
Como todas las piezas relacionadas con la mecánica de un coche, la bomba de freno está continuamente siendo usada, por lo que es normal que se desgaste con el uso y el paso del tiempo.
Es importante seguir las recomendaciones del fabricante y de nuestro mecánico de confianza, cambiándola cuando nos lo indiquen ya que, aunque son robustas, pueden fallar cuando ya tienen muchos kilómetros de uso
Principales averías y cómo detectarlas
Hay que tener presente que si el vehículo circula con determinada resistencia, como si fuese frenado, puede deberse a varias causas. Una de ellas puede ser el agarrotamiento de alguno de los sistemas de freno, lo que hace que alguna de las ruedas vaya parcialmente frenada.
En este caso, lo más normal es que las pinzas de freno estén agarrotadas, que el freno de mano no ha retrocedido por completo o que hay un problema de malfuncionamiento en la bomba de freno.
Otro problema que podemos encontrar cuando una bomba de freno no está funcionando de manera correcta es el de encontrarnos con el pedal de freno demasiado blando. Nos daremos cuenta no solo por el tacto del pedal sino que también lo notaremos cuando la distancia de frenada es superior al normal. En este caso, lo mejor es sustituir la bomba de freno y evitar cualquier posible accidente.