Cada día, el número de accidentes automovilísticos aumenta y se consiente una prevalencia importante en los turismos antiguos. Según los datos de la DGT (Dirección General de Tráfico), en los turismos de más de 15 años el riesgo de fallecimiento es mucho mayor que en los coches más modernos. Esta cuestión se ha demostrado en diversos estudios que buscan reducir la mortalidad vial, detectando la edad de los automóviles en los diferentes siniestros.
Los vehículos con más de 10 años de antigüedad, según los estudios realizados, son un riesgo mucho mayor para los usuarios. Se ha calculado que en comparación con un coche nuevo bien mantenido, los cuales presentan un riesgo superior hasta un 53%, es decir, la situación es mucho más desfavorable al primero.
h2> ¿Por qué los vehículos antiguos conllevan un mayor riesgo?
Existen una serie de motivos que explican este riesgo, donde encontramos principalmente el estado de los neumáticos, los frenos, la mecánica, entre otros. Los neumáticos, es una de las principales causas de los accidentes en los vehículos antiguos. Los vehículos con desgaste de los neumáticos, conllevan problemas como el agarre en carretera o el penalizante efecto de la lluvia. Estos factores dejan de estar presentes en vehículos con menos de 10 años de antigüedad. Por otro lado, los frenos también influyen en el número de accidentes, ya que resultan mucho más efectivos en los coches más nuevos.
La mecánica también contribuye al aumento del riesgo en los coches antiguos. Los cambios de cilindrada, la conversión a gasolina, el deterioro del motor, la antigüedad de los amortiguadores o la obsoleta tecnología de la suspensión en los vehículos más antiguos, hacen que el riesgo aumente significativamente. Aunque existen otros factores como la conducción, el uso del cinturón, la correcta evaluación de los obstáculos en la vía, también es cierto que el mantenimiento de los vehículos antiguos es determinante para prevenir accidentes.
¿Qué se puede hacer para reducir el riesgo de accidentes en los vehículos antiguos?
Contar con un buen estado del vehículo, un mantenimiento adecuado, es una señal para prevenir los riesgos en la carretera. Existen algunas recomendaciones sencillas para mantenerse a salvo en los coches antiguos, como la instalación de cámaras de seguridad, control de luces, estado de los neumáticos, el cumplimiento de los niveles de aceite, las suspensiones correctas, el control adecuado de los frenos y la revisión de los cinturones de seguridad.
Otra recomendación es llevar a cabo un seguimiento específico del uso, la velocidad, el kilometraje, el estado de mantenimiento, la información meteorológica y demás, es importante para mantener una conducción segura y evitar accidentes.