Ya sea un coche, una furgoneta o una motocicleta, el óxido es un problema común al que se enfrentan todos los propietarios de vehículos. Si no se controla, el óxido puede extenderse rápidamente y causar daños en las piezas metálicas de tu vehículo. Esto puede dar lugar a importantes reparaciones y a una disminución del valor de tu coche.
Por qué se forma el óxido en los vehículos
El óxido es un proceso químico que se produce cuando el hierro y el acero entran en contacto con la humedad o el aire. Cuando estos materiales quedan expuestos a estos elementos, las moléculas de oxígeno pueden unirse al metal, formando óxido de hierro. Esta capa de óxido puede extenderse rápidamente a otras partes de tu vehículo y hacerse más difícil de eliminar. Muchos conductores observarán que el óxido se forma en ciertas zonas de su coche, como los pasos de rueda, bajo el capó y en los marcos de las puertas y del maletero.
Cómo evitar que se forme óxido en el futuro
Una vez que hayas eliminado el óxido de tu vehículo, es importante tomar medidas para evitar que se forme en el futuro. He aquí algunos consejos que te ayudarán a proteger tu vehículo del óxido:
- Mantén tu vehículo limpio: La suciedad, la sal de carretera y otros productos químicos pueden engancharse fácilmente en los rincones de tu coche, provocando la formación de óxido. Lava tu vehículo regularmente y limpia la suciedad o los restos para ayudar a mantenerlo libre de óxido.
- Aplica una capa protectora: Aplicar una capa protectora, como cera o poliuretano, puede ayudar a proteger tu vehículo de los elementos y evitar el óxido. Asegúrate de aplicar la capa a todo el vehículo, incluido el chasis y los pasos de rueda.
- Cuida las abolladuras o arañazos: Las abolladuras y arañazos pueden exponer el metal de tu vehículo a los elementos, haciéndolo más susceptible al óxido. Para evitarlo, asegúrate de reparar cualquier abolladura o arañazo en cuanto se produzca.
Por este consejo y utilizar los métodos mencionados más arriba, puedes eliminar fácilmente el óxido de tu vehículo y evitar que se forme en el futuro. Con un mantenimiento regular, puedes mantener tu vehículo en perfecto estado durante muchos años.