En ocasiones uno de los circuitos eléctricos del coche deja de funcionar. Y, esto, puede deberse a que la pieza fusible correspondiente se ha fundido. Cambiar estos componentes es algo que se puede hacer de forma sencilla y sin peligro. Te explicamos cómo conseguirlo.
La función de los fusibles es la de cortar el trabajo cuando la tensión es excesiva al funcionar el coche, evitando que se tengan problemas en los dispositivos como por ejemplo el sistema de lámparas o la radio. Si se rompe, mala suerte, pero cumple con su cometido.
Cómo detectar que un fusible se ha fundido
Esto es de lo más sencillo. Por ejemplo, si un intermitente no funciona y la bombilla no tiene un desperfecto, lo normal es que el problema sea que el fusible se ha roto. Por lo tanto, hay que cambiarlo por uno nuevo.
Algo que es importante para realizar un cambio correcto, es elegir uno nuevo que sea del mismo color que el fundido. Los fabricantes tienen un código (DIN 72581) que permite no fallar, ya que el calibre de los que tiene la misma tonalidad es el mismo. Por lo tanto, no vas a tener dudas al respecto si te fijas un poco.
Pasos para realizar el cambio
- Lo primero es encontrar la caja de fusibles, algo que es sencillo si recurres al manual de usuario del coche. (generalmente, están bajo el capó o en la zona inferior del salpicadero).
- Desconecta la batería para no tener problemas y, además, es recomendable utilizar una pinza para manipular los fusibles.
- Gira el fusible sobre él y, luego, tira con las pinzas. Ahora, coloca en el mismo lugar el nuevo sin forzar.
- Conecta la batería y, listo, ya has cambiado el fusible fundido por uno nuevo y todo funcionará perfectamente otra vez.