En pocas palabras, las pastillas de freno son tu salvavidas cuando de la conducción de tu coche se trata. Simple y llanamente, son las piezas del sistema de frenado que detienen el coche cada vez que es necesario.
La importancia de las pastillas de freno
En la mayoría de los casos, las pastillas de freno son piezas fabricadas con virutas de diferentes metales unidas con una poderosa resina. Su función específica e importancia están en su capacidad de detener el movimiento del coche y, para hacerlo, trabajan por fricción.
Cada llanta del auto suele llevar dos pastillas situadas a ambos lados del disco de frenado. Para detener el coche atenazan el disco y van reduciendo su velocidad de manera sistemática y sostenida. Son fabricadas con diferentes tipos de materiales, desde materiales orgánicos hasta materiales sintéticos como la cerámica.
En términos reales y prácticos, son las encargadas de garantizar que tu vehículo se detenga cuando así lo exiges. Esto significa que es absolutamente necesario que las mantengas en óptimas condiciones de funcionamiento. De su estado depende la efectividad de la frenada, si no es bueno, se alarga la distancia de frenado y aumenta la posibilidad de sufrir un accidente.
El sistema de frenado está conformado por tres elementos básicos: las pastillas, los discos y el fluido de freno. Este último tiene como función transmitir fuerza desde el pedal de freno hasta las llantas y producir una frenada segura. Las pastillas demandan un mantenimiento regular para controlar su desgaste.
Si cuando pisas el pedal del freno se produce un sonido chirriante en las llantas, tienes una señal de desgaste de las pastillas. Significa que es el momento de renovarlas pues ya no están siendo todo lo seguras y eficientes que deben ser.
Por último, nos gustaría recordarte que si buscas piezas de desguace en Canarias, si quieres encontrarlas rápidamente, podemos ayudarte.
