Comprar un coche usado puede suponer un gran ahorro para muchas personas, aunque en ocasiones puedan tener alguna pequeña avería, pero nada que no se pueda solventar comprando piezas de desguace. A pesar de ello no hay que confiarse a la hora de comprar un vehículo usado hay que tener en cuenta muchos aspectos, como los que te vamos a enumerar en este artículo.
Aspectos a tener en cuenta a la hora de comprar un coche usado
Lo primero que hay que hacer es mirar bien el exterior del coche y ver si hay algún problema con la chapa o la pintura. Se debe comprobar si tiene algún problema de óxido, porque es algo que debe solventarse cuanto antes porque puede afectar a toda la chapa del vehículo. También hay que mirar si hay masilla, abolladuras y controlar la parte inferior del vehículo.
Se recomienda abrir el coche y revisar el interior, buscando daños en la tapicería, desgaste por el sol o el uso. Hay que comprobar que las puertas abren y cierran correctamente así como el elevalunas y los diferentes dispositivos como aire acondicionado, calefacción, radio, etc.
El motor es otra de las partes que hay que examinar al máximo. Por eso, si no se tiene mucha idea de mecánica, nunca está de más contratar los servicios de un mecánico de confianza que se encargue de revisar el motor y nos revele si está en buenas condiciones y si recomienda comprar el vehículo o no.
Además de una revisión por parte del mecánico y de comprobar que todos los líquidos están a niveles óptimos, también hay que probar el coche poniéndolo en marcha. En esto, el mecánico también tendrá mucho que ver porque se encargará de verificar que todo está correctamente.
El hecho de pedir una prueba de conducción también es necesario, de esta forma se podrá comprobar cómo responde el vehículo en marcha, si arranca bien, frenos, sistema eléctrico, cuadro de mandos, embrague, cambios, acelerador y todo lo relacionado con la conducción.