Aunque lo normal a la hora de vender un coche sea el propietario o propietaria quienes le pongan el precio, hay otras personas que prefieren contar con el asesoramiento de un experto en valoración de vehículos y así pedir un precio más acorde con lo que se va a vender, lo que incluso proporcionará al comprador una información de valor, porque sabe a ciencia cierta por lo que verdaderamente está pagando.
Pero ese no es el único aspecto que debemos tener en cuenta a la hora de comprar un vehículo. ¿Cuáles son los pasos a seguir para realizar una correcta transacción del coche?
Nunca está de más formalizar un contrato de compraventa, para una mayor seguridad, tanto para el vendedor como para el comprador. Tras ello hay que ir hasta Hacienda para pagar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y tras ello dirigirse a la Jefatura de Tráfico de la localidad para hacer efectivo el cambio de titularidad.
Hay que entregar toda la documentación cumplimentada y firmada por el vendedor y el comprador junto al contrato de compraventa, la tarjeta de la ITV, el justificante de pago del último impuesto de circulación, el permiso de circulación y también el comprobante de pago del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales de Hacienda.
Asimismo hay que abonar una tasa de unos 52 euros aproximadamente donde se acredite la identidad de ambas partes que intervienen en la compraventa. Hay otros casos en los que si el vehículo a comprar procede de alguien fallecido, el vendedor debe contar con el acta de certificación de fallecimiento y la parte testamental que acredite al vendedor como heredero del vehículo.
Para finalizar, en caso de hacer la compra en un establecimiento de compraventa, lo más normal es que el personal se encargue de llevar todo el papeleo, lo que incrementará un poco el precio.